NOMOFOBIA
¿Cuántas veces nos ha pasado que estando fuera de
casa nos percatamos deque nuestro teléfono celular está a punto de quedarse sin batería y no hay dónde conectarlo? O vemos que quiere entrar una llamada y de momento no podemos contestar.
Experimentamos una sensación de ansiedad, ta
quicardia y en algunos casos, dolor de cabeza y de estómago, nos sudan las manos y ya no podemos prestar atención a lo que estamos haciendo.
Anteriormente los celulares se utilizaban únicamente para comunicarnos por medio de llamadas, pero el uso que se les da en la actualidad es muy variado: podemos escuchar música, tomar fotos, mantenernos informados, leer libros o artículos, enviar mensajes de texto y de voz, crear contenido en redes sociales, entre muchas otras cosas sin tener que desplazarnos del lugar donde nos encontramos y de forma inmediata.
Sin duda existen beneficios por el avance tecnológico actual, pero el problema empieza cuando no hay límite en el uso del móvil y entonces se puede caer en una dependencia. Esto está afectando principalmente a niños y adolescentes en:
- Su desempeño académico.
- Falta de atención.
- La interacción social y familiar
- Además, causa vista cansada y malestar físico por postura incorrecta.
La nomofobia o tecnoadicción es el miedo extremo o ansiedad que puede ocurrir al:
- No lograr comunicarse con otras personas.
- No ver las notificaciones que se reciben de alguna red social.
- No poder acceder a un video juego o a la información requerida.
- Sentirse incomunicados.
¿Cuáles son los síntomas que nos ayudan a detectar si nosotros o alguien que conocemos padece nomofobia?
- Ansiedad, irritabilidad cuando no se tiene el celular a la mano.
- Tener el celular consigo sin importar lo que se esté haciendo.
- No respetar los lugares o momentos prohibidos para su uso.
- Preferir el celular antes que actividades de importancia como la escuela, el trabajo, una reunión y/o comida familiar o el descanso.
- Dormir con el celular prendido y lo más cerca posible para poder escucharlo cuando suena.
- Consultar el celular de manera persistente.
¿Qué podemos hacer para prevenir que nuestros hijos caigan en esta adicción?
- Ser modelo a seguir, no se puede exigir que no lo usen en exceso si como padres hacemos lo mismo.
- Establecer horarios para el uso del celular.
- Si se requiere para realizar alguna tarea, darles alternativas diferentes al celular para resolverla.
- Proponer actividades en familia que no incluyan este tipo de dispositivos.
- Mantenerse activos y ocupados en actividades físicas o recreativas que no involucren tecnología.
- Revisar cuáles aplicaciones y juegos son innecesarios por no aportar algo bueno o valioso y eliminarlos.
Si detectamos que nuestros hijos presentan algunos de los síntomas antes mencionados y esto les está provocando inconvenientes, tal vez estemos frente a un caso de nomofobia y podría ser necesario buscar ayuda profesional.